viernes, 19 de agosto de 2016

Lactancia materna "prolongada", lo que nadie nos dice...

Estas semanas me he enfrentado a un desafío que no pensé que viviría, porque inocentemente pensé que vivía rodeada de gente más o menos informada de algunas realidades de la vida. Pero me equivoqué.
Con respecto a la famosa lactancia materna, en un principio todas vivimos la presión de darle pecho a nuestros hijos y alimentarlos con nuestra propia leche. Las que logramos sortear los escollos nos sentimos orgullosas de lo logrado y nos creemos lo máximo cuando el pediatra nos dice que nuestro hijo esta gordito, y al resto de la gente le falta aplaudirte no más cuando se enteran de que la obesidad de tu hijo es gracias  la "pura teta". Y las que no logran dar el pecho deben en un principio lidiar con la propia culpa de no haberlo logrado, entrando en esta especie de duelo de la lactancia, que en algunos casos se torna difícil de manejar, enfrentando algunas veces comentarios desubicados y cuestionamientos que activan el área de la culpa en nuestro cerebrito.
Y las que lo vamos logrando pasamos por las crisis de lactancia, los brotes de crecimiento, el volver al trabajo, la introducción de la comida, etc, y nos seguimos sintiendo orgullosas de nuestro gran esfuerzo y de nuestro lindo y sano hijo.
Pero parece que de repente la lactancia tiene fecha de vencimiento. De repente mi hijo no engordó tanto como antes, empezó con problemas para comer, porque ya está aburrido de la papilla, porque quiere comer solo, porque le están brotando todas las muelas al mismo tiempo y le duele, porque quiere comer las mismas cosas que están en los platos de los "grandes", etc. Y yo empiezo a sufrir por que el pediatra me dice que el niño esta retrocediendo y que mi leche se está tornando perjudicial para el niño....qué?! escuché bien?!, me dan ganas de llorar y contestarle, pero mejor no digo nada porque enojada me saldrá cualquier cosa. Le digo que intenté darle fórmula pero que le provoca náuseas y termina vomitando lo que comió. Me dice "tienes que desaparecerte, unos dos días, que tenga hambre...sí me fui, dos días a Santiago y no resultó......Entonces desaparece 4 días, lo que haga falta....
Me fui llorando el camino de vuelta a la casa. Tenía rabia de la ignorancia, de la poca empatía, y del daño que se hace. Pensaba, que ese médico atiende a muchas mamás al día y si le da ese consejo a una mamá que no está informada, puede ser muy dañino.
Dañino porque creo que cuánto dure la lactancia es una decisión muy intima, muy nuclear, que involucra a mamá, papá y bebé. Y no hay más!. No hay más personas que sean dignas de meterse en esa discusión, Ni tu mamá, ni tu suegra, ni tu amiga, ni el pediatra, ni la vieja de la esquina.
Esa fue la primera de varias situaciones muy incómodas donde se ha cuestionado que yo amamante a mi hijo de un año y 4 meses.
Agradezco nuevamente ser una mamá informada. Finalmente no he peleado con nadie porque encuentro insólito que yo tenga que explicar algo tan personal, natural, instintivo y aunque usted no lo crea NORMAL.
Aún así me afectó mucho recibir todos estos comentarios. Me dio mucha pena, porque estar un año 4 meses lactando no es una tarea fácil, y la gente que critica no ve, ni conoce nuestra relación con Pedro.
Digo nuestra relación porque aquí también se involucra mi esposo. Él me dice (muy sabiamente) que las personas que opinan no conocen a Pedro, no saben lo activo que es, no han visto todo el cariño y amor que recibe, no ven como el desarrollo del apego y la lactancia materna "prolongada", han hecho que sea un niño amoroso, curioso, alegre, sociable y de energía inagotable. Le menciono uno de los comentarios que escuché: "A nosotros los hombres no nos gusta que las mujeres den teta tanto tiempo". Pero él me dice que la decisión de continuar la lactancia ha sido siempre una decisión de familia, que si me critican a mi, la responsabilidad recae también en él y que cualquiera que quiera cuestionar nuestra opción, que lo hable con él también. Yo le digo que lo sé, pero que aún así me duele.
Me duele porque parece que nadie ve lo sublime que es amamantar, que trasciende lo práctico. La lactancia materna es lo que nos ha mantenido vivos en la tierra, evolutivamente hablando sin la lactancia materna ahora no existiríamos. Me duele porque la mayor parte de los comentarios los he recibido de personas que trabajan en salud, igual que yo. No entiendo como pueden transmitir ideas tan nefastas a diestra y siniestra, poniendo ideas erróneas en las cabezas de las madres que seguramente han tenido suficiente de ser apuntadas con el dedo por entregar algo tan valioso como es la leche materna.
He quedado sorprendida de todo esto, uno piensa que los desafíos de la lactancia terminan cuando ya la guagua logró por fin acoplarse al pecho, pero nadie te dice que de las felicitaciones vas a pasar a ser un bicho raro que malcría y desnutre a su hijo por darle teta.
Así que dejemos las cosas claras por favor. Existen varios organismos muy confiables tales como la OMS, UNICEF, Asociación Española de Pediatría, American Academy of Pediatrics, Australian Breastfeeding Association, etc, etc, etc. que recomiendan la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses. Luego recomiendan continuar con la lactancia complementando con otros alimentos hasta por lo menos los 2 años y de ahí en adelante hasta que mamá y bebé lo deseen. Ninguna de estas respetadas organizaciones le pone una fecha de término a la lactancia!
Si estas leyendo esto on line, es porque vives en un lugar más o menos cómodo, con acceso a agua potable, salud, seguramente tienes un techo y una cama calentita donde pasar tus días con tu guagua. Bueno, en países donde el acceso a salud, agua potable, insumos sanitarios y leche de fórmula son un sueño, la lactancia materna hace la diferencia en grande, Salva vidas! acá no vemos ese impacto porque tenemos todas las comodidades, por lo tanto la lactancia probablemente nos ahorrará solo una ida a la urgencia. no es así?. En estos países la lactancia materna pasa a ser una política de salud pública y tiene más repercusiones que cualquier otra intervención preventiva. Ni hablar del impacto que debe tener en zonas de guerra!, Esos niños que necesitan ser nutridos con urgencia física y emocionalmente.
La lactancia hasta el siglo 18 y 19 se extendía hasta los 2 a 3 años de vida. Lo que lo cambió todo fue la era industrial, con la aparición de sucedáneos de la leche y cambios sociales como la introducción de la mujer al mundo laboral, provocando el destete prematuro de los bebés.
Según estudios, el destete natural para el homo sapiens sapiens esta entre los 2 y los 7 años!!
La leche materna después del año tiene incluso más grasa que la leche de los primeros meses y aún es una fuente muy importante de vitaminas y minerales. Además de que sigue aportando beneficios inmunológicos, lo que significa una menor incidencia en las infecciones.
Por otro lado favorece un mayor desarrollo intelectual, previene a largo plazo el maltrato infantil, hay una mejor relación con los padres en la adolescencia y una mejor salud mental en la vida adulta.
En los estudios el único riesgo que se describe para la madre es el rechazo social y profesional. No se describen otras desventajas de la lactancia mal llamada "prolongada".
En conclusión lejos de hacerle un daño a mi hijo, estoy forjando un futuro, lleno de amor, de bellos recuerdos para ambos de este periodo, que por cierto no se repetirá. Por favor dejemos de engañarnos con adoctrinamientos que nacen de la necesidad de ignorar los requerimientos nutricionales y afectivos básicos de los niños, y de apagar nuestro instinto maternal por hacer nuestra vida social y profesional más cómoda. O para satisfacer al marido?! Dios mio!
Si vemos a una mamá con un niño de más de un año amamantando, felicitémosla, o sigamos nuestro camino sin opinar. Si una mamá decide no dar pecho, bien. Si una mamá decide continuar porque puede hacerlo, bien también.



dejémonos de joder!!


Juno amamantando a Hércules


lunes, 1 de agosto de 2016

Lactancia Materna: Inversión a largo plazo

Hoy es un día muy especial para nuestra familia. Hoy comienza la semana mundial de la lactancia materna y en el hospital donde trabajo se realizan actividades relacionadas con la promoción de la lactancia materna.
Y para mi sorpresa me llamaron la semana pasada para invitarme y entregarme un reconocimiento. 
Este reconocimiento es debido a que he sido la única mamá/funcionaria del hospital donde trabajo que recurrió al SEDILE (servicios dietéticos de leche) para solicitar que le dieran la leche materna que yo conservaba en casa a mi hijo en la sala cuna del hospital. 
Cuando fui a consultar por esta posibilidad la verdad fui sin mucha esperanza de conseguir algo y ya me estaba haciendo la idea de que mi lactancia iba a terminar por culpa de la vuelta al trabajo, como pasa muchas veces. Eso me ponía muy triste porque pensaba que después de tanto esfuerzo terminar la lactancia por ir al trabajo era realmente absurdo.
Sin embargo, para mi sorpresa, Carolina Alarcón, nutricionista de SEDILE, estaba casi más entusiasmada que yo al proponer la idea de traer mi leche bajo cadena de frío, todas las mañanas para que ellos (SEDILE), enviaran mi leche, descongelada y a la temperatura perfecta a la sala cuna del hospital para que mi hijo pudiera seguir alimentándose con leche materna mientras yo trabajaba. Fue maravilloso encontrarme con un apoyo tan abrumador, lo único que Carolina me preguntó era si yo sabía almacenar leche y si sabía como transportarla. A lo que respondí como la mamá ñoña que soy, que por supuesto, estábamos listos para empezar la operación.
Eso fue en Octubre del año pasado. Hoy mi hijo tiene un año y 4 meses y aún está con lactancia materna. Ha sido un viaje maravilloso, con altos y bajos, pero muy reconfortante al sacar conclusiones.
Estoy muy orgullosa de mi familia, porque no nos rendimos. Buscamos la posibilidad de continuar con la lactancia como fuera. No queríamos que la vuelta al trabajo nos quitara todo el esfuerzo realizado hasta ese momento. Y una acción destinada a beneficiar a  mi hijo, se ha transformado en una hermosa iniciativa que otras madres pueden utilizar también, El SEDILE del Hospital Dr. Hernán Henriquez Aravena de Temuco, sienta un precedente en el apoyo incondicional a la lactancia materna en sus trabajadoras y eso me llena de felicidad.
Y es así como se comprueba que las grandes diferencias parten por un par de personas pensando en su casa como hacer algo diferente, y luego con otra persona que decide ayudar y así los grandes cambios que esta sociedad necesita van ocurriendo...."yo no puedo cambiar el mundo.. pero puedo cambiar mi mundo"
La lactancia materna es una inversión a largo plazo, uno siente que se le va la vida dando teta, se te pasan las horas y los días sentada en el sillón tratando de acoplar bien, pensando en cuándo se te quitara el dolor de tetas, que si lograrás llegar al mes de lactancia, después a los 6 meses y así...no te das cuenta cuando ya tu hijo camina y crece sano y feliz. La lactancia es una experiencia empoderadora de la mujer. Es muy potente poder además de dar vida poder alimentarla, hacerla crecer, sin necesitar nada más. El nexo que se desarrolla con el hijo, con uno misma, con la pareja son fenómenos maravillosos que no se deberían perder. Todas nos merecemos tener una lactancia feliz.
No puedo dejar de agradecer a mi esposo, Eduardo, quién sabe sabe tanto de lactancia como yo. El ha estado amamantado conmigo por un año y 4 meses. Sosteniendo mis restos en los días duros y sintiéndose orgulloso en días como este. La lactancia involucra a la familia completa.
Que increíble el destino. Yo era de esas mujeres que  no se veían con un niño en los brazos y mi familia no termina de sorprenderse viéndome con Pedro. Yo que empecé a escribir motivada por mi esposo, para poder contar las cosas que me pasaban y no sentirme sola en el mundo y para compartir todo lo que fui aprendiendo día a día en este camino. Y ese camino me ha llevado a conocer un montón de otras mujeres que tal como yo han necesitado apoyo y consejo en algún momento difícil. Nunca me imagine que estas acciones que parecían tan simples en su momento, tendrían un impacto mayor en el futuro.
Estoy muy contenta, gracias a mi hijo que ha cambiado mi vida por completo, enfrentándome a mis sombras y luces, que me ha hecho descubrir cosas nuevas sobre mi y el mundo. recién ahora, se empiezan a ver los diversos frutos de haber sido porfiados y perseverantes como familia. Ahora más que nunca puedo asegurar que la lactancia es mucho más que alimentar al hijo...la lactancia materna y la maternidad son una REVOLUCIÓN!!!!!